No era una catedral, no era una parroquia, no era un templo, ni mucho menos era una capilla. . . era uno de esos lugares que se les llamaban antiguamente "persinaderos" o "humilladeros", en dichos lugares ocurrían todos los lugareños y vecinos a estos sitios a orar, rezar y a alabar a Díos. Pues no era la ecepción en dicho cuartel cuarto de aquella calle de tipo campirano que se encontraba el Rancho San Cristobal de la juridicción de la Hacienda la Erré de municipio de San Miguel el Grande del Estado de Guanajuato. Que mas tarde dicha calle ostentaría el nombre del Estado de Michoacán; cuando esta comunidad llevaria el heroico nombre de DOLORES HIDALGO, CUNA DE LA INDEPENDENCIA NACIONAL. En dicho humillanero aparecio de la noche a la mañana, un cuadro de un imagen de un Santo que Nadie conocia y al señor Cura y a sacerdotes los confundia, unos le decian San Ramón otros San Agustín y otros. . .
Pero le resaban y le adoran, le pedían y él les concedia lo que el milagro, un día una humilde mujer llego pidiendole que la socorrera por que tenia a su esposo unico familiar que tenia, lo tenia gravementemente enfermo y no tenia con que pagar las curaciones, ni para los alimentos para él y para ella.
Su plegaria, su suplica, su pedimento eran iknsistentes, que llego a oidos del Santo, que un día al estar frente a la imagen, miro que el pequeño lugar se llenaba de una luz blanca resplandeciente y oyo una voz patgernal que provenia, de aquel Santo vestido de obispo, que le decia: "Hijita tu suplica a llegado a nuestro señor por mi interseción, mira despega los ladrillos de en medio del altar y excaba un poco y encontraras lo que necesitas la mujer como automata hizo lo que aquella voz le decia saco del hoyo un pequello morral, la mujer se persino y se santiguo y salío a pagar lo que debia y de rao volvio con el pequeño morral y lo volvio al lugar y puso los ladrillos en su lugar
y salio dejando un pequeño papel escrito, el cuál decía: "EL SANTO SE LLAMA SAN NICOLAS OBISPO".
jueves, 11 de junio de 2009
lunes, 8 de junio de 2009
"EL CERRO DEL CHIVO"
Cuentan los viejos de aquella comunidad llamada Estancia de Zamarripa del municipio de Dolores Hidalgo, Cuna de la Independencia Nacional del glorioso Estado de Guanajuato.
Que al atardecer en aquel cerro el mas grande y puntiagudo, se veia la silueta de un chivo enorme de un bramido potente que al decir de la gente retumbaba por todos los lugares aledaños, esto asustaba a todos los lugareños, por eso muy temprano de recogian y haya en el interior de cada casa se oia por hay como a las siete y media o ocho de la noche rezar el Santo Rosario y el consabido "¡gloria al Padre, gloria al hijo y gloria al Espirito Santo! "¡Por los siglos de siglos, amen! y el "¡María madre gracia y madre de misericordia!" "¡ en la vida y en la muerte, amen!".
Un buen día se armo de valor aquel hombrecillo insignificante: chaparro, flaco, flaco, flaco (que dice la gente antes de salir de su casa a diario le decia su mujer)
_ "¡No olvides las piedras "chololo" (el contestaba)
_ "¡Vete al carajo, vieja chingada, yo soy como la vara de membrillo delgada y corriosa nomas me blandeo!" (y en voz baja decia para sí) si me las cargo no. . . vaya ser que si por las dudas. . .
Pero siempre lo sorprendia, la mujer, haciendo lo mismo, y él terminaba diciendole:
_"¡Vete mucho al chivo!"
Y el unico animal que tenian por riqueza aquella familia era un "cabron" o sea una cabra macho, el cuál al oir a su "amo" decir aquellas palabras parecia que se burlaba en su bramido, ellos ni se fijaban aquel detalle, así paso el tiempo y un buen día el animal murío al igual qu el hijo unico que había tenido Eufrasia hija de aquel matrimonio, el niño se llamaba Isidoro Salazar Castañeda, llevaba los apeidos de su mamá ya que era hijo natural, los chismes de las malas lenguas de la Estancia de Zamarripa, decian que era su amante Eufrasia su propia hija.
Aquella noche, de aquel día como a las nueve de la noche se vio enfilar a Isidoro Salazar González, hacia el cerro del chivo que dista del rancho hacia el poniente kilometro y medio, quien diria que aquel hombre hiba encontrarse con su destino.
Ahí, lo esperaba aquella descumunal bestia, que al verlo frente a frente lanzo un feroz bramido y se hoyo lo siguiente:
_ ¡¡¡ BIENVENIDO PAPITO, beee, beee, beee, TE ESTADO ESPERANDO POR AÑOS, VEN VAMONOS A NUESTRO LUGAR !!!
Al momento se hoyo un grito terrorifico y desgarrador:
_ ¡¡¡¡NNNNOOOO, ME LLEEEVVVEEESSS!!!!
_ Si maistro. . . Diocito. . . le digo la verdad, como que me llamo Felipe Salazar. . . eso le paso a mi pariente, in verda y Diocito, i ñor profe, y jamás volvio a su jacal y por estos lares' se lo llevo el demoñio al mismito infierno, i ñor, ansí como se lo cuento.
Que al atardecer en aquel cerro el mas grande y puntiagudo, se veia la silueta de un chivo enorme de un bramido potente que al decir de la gente retumbaba por todos los lugares aledaños, esto asustaba a todos los lugareños, por eso muy temprano de recogian y haya en el interior de cada casa se oia por hay como a las siete y media o ocho de la noche rezar el Santo Rosario y el consabido "¡gloria al Padre, gloria al hijo y gloria al Espirito Santo! "¡Por los siglos de siglos, amen! y el "¡María madre gracia y madre de misericordia!" "¡ en la vida y en la muerte, amen!".
Un buen día se armo de valor aquel hombrecillo insignificante: chaparro, flaco, flaco, flaco (que dice la gente antes de salir de su casa a diario le decia su mujer)
_ "¡No olvides las piedras "chololo" (el contestaba)
_ "¡Vete al carajo, vieja chingada, yo soy como la vara de membrillo delgada y corriosa nomas me blandeo!" (y en voz baja decia para sí) si me las cargo no. . . vaya ser que si por las dudas. . .
Pero siempre lo sorprendia, la mujer, haciendo lo mismo, y él terminaba diciendole:
_"¡Vete mucho al chivo!"
Y el unico animal que tenian por riqueza aquella familia era un "cabron" o sea una cabra macho, el cuál al oir a su "amo" decir aquellas palabras parecia que se burlaba en su bramido, ellos ni se fijaban aquel detalle, así paso el tiempo y un buen día el animal murío al igual qu el hijo unico que había tenido Eufrasia hija de aquel matrimonio, el niño se llamaba Isidoro Salazar Castañeda, llevaba los apeidos de su mamá ya que era hijo natural, los chismes de las malas lenguas de la Estancia de Zamarripa, decian que era su amante Eufrasia su propia hija.
Aquella noche, de aquel día como a las nueve de la noche se vio enfilar a Isidoro Salazar González, hacia el cerro del chivo que dista del rancho hacia el poniente kilometro y medio, quien diria que aquel hombre hiba encontrarse con su destino.
Ahí, lo esperaba aquella descumunal bestia, que al verlo frente a frente lanzo un feroz bramido y se hoyo lo siguiente:
_ ¡¡¡ BIENVENIDO PAPITO, beee, beee, beee, TE ESTADO ESPERANDO POR AÑOS, VEN VAMONOS A NUESTRO LUGAR !!!
Al momento se hoyo un grito terrorifico y desgarrador:
_ ¡¡¡¡NNNNOOOO, ME LLEEEVVVEEESSS!!!!
_ Si maistro. . . Diocito. . . le digo la verdad, como que me llamo Felipe Salazar. . . eso le paso a mi pariente, in verda y Diocito, i ñor profe, y jamás volvio a su jacal y por estos lares' se lo llevo el demoñio al mismito infierno, i ñor, ansí como se lo cuento.
miércoles, 3 de junio de 2009
"EL PEREGRINO DE ZACATECAS"
Corria el año de gracía del Señor, de 1900., cuando por las calles unas empedradas y otras polvorientas del pintorezco pueblo de Dolores Hidalgo, Cuna de la Independencia Nacional en el Estado de Guanajuato; dianbulaba un hombre joven de carateristicas barretero, se veia a simple vista que era fuereño tipo "anorteñado" o es decir del norte de nuestro país, serian como las seis o siete de la mañana cuando caminaba como buscando a alguien pero como a su paso no se encontraba con nadie se mira desesperado y tristen en su diestra llevaba un cuadro de lamina no grande, no pequeño. en la otra mano un modesto ramo de flores: serian rosas. . . serian claveles. . . o tal vez gladiolas. . . quien sabe; a su espalda una luida, depintada y mugrosa mochila y como vestia con ropas de minero cubria su cabeza el tradicional cazco, no era alto, ni chaparro, tampoco no era gorda ni delgado, de tez morena.
Su busqueda hiba a tener buenos resultados por que el clasico grito:¡¡¡CHICHARRON DE PUERCOS Y PUERCAS MUJERES!!! ¡¡LLEVEN SUS PATAS DE PUERCO MUJERES!! Al oir esos gritos lanzo una sonora y sabrosa carcajada aquel extraño turista y dijo en voz alta:
_¡Que barbaridades anda gritando ese valedor!
No se habia fijado que aquel que grito estaba parado frente a él, el cuál le dijo:(alisandoce el bigote)
_¡Oiga amiguito quien grito, barba. . . eso que dijo y de cuál se acaba de burlar!
Al verlo, aquel hombre, titubio y turbado dijo:
_Coj, coj, coj, hum, hum, hum, no se enoje señor, pero lo invito a que analice sus palabras que grita.
_ Pos' cuales, pos' grito varias?, ¡bueno, bueno, en fin con quien tengo el placer de hablar!
_ Por hay hubieramos empesado, soy. . .
Despues de haberse presentado ambos hombres, salieron tan amigos que el chicharronero que no era otro que Juán Juárez (a) Juán Borucas, lo oriento y encargandole su batea con carnitas y su bote alcoholero con manteca y demas mercancia a una mujer habia salido a barrer en ese momento, lo cuál lo vio mal e inocentón el viajero visitante pero no dijo nada; caminaron calles y calles hasta que la esquina de San Pedro y Salida al Gallinero se pararon y que hombre medio chaparrón, botijón y bigotón le señalo la residencia de la AMA DEL BARRIO DE LA LOMA, aquella señora por todos los del barrio conocida como "LA AMITA CHOLITA" Su residencia era una modesta hornacina.
Al verla el peregrino de Zacatecas, xclamo. . .
_ ¡¡¡¡SI ES ELLA, LA QUE ME SALVO DE CARCEL DE SAN JUAN DE OLUA!!!!
El carnicero pelo tamaños ojos y santiguandose se alejo carreiendo y gritando:
_ ¡¡LA AMITA HIZO UN MILAGRO, LA AMITA HIZO UN MILAGRO!!
Cuenta la tradicción, cronica y la leyenda que ese minero a parte de traerle flores y su "exvoto" o cuadro alusivo a la gracia recibida por la Virgen de la Soledad de Piedrita nombre que le dijo al minero para que preguntara por ella, dejo monedas de oro y tres barras de oro para que le compraran la casa a don Toribio Martinez y le contruyeran un templo, todo esto recibio el Señor Cura de Parroquia de los Dolores y de lo cuál fueron testigos Juán borucas, Arcadio Juárez y Cirilo Muñiz, el segundo era el mayordono del templo y encargado de se hiciera la obra.
Su busqueda hiba a tener buenos resultados por que el clasico grito:¡¡¡CHICHARRON DE PUERCOS Y PUERCAS MUJERES!!! ¡¡LLEVEN SUS PATAS DE PUERCO MUJERES!! Al oir esos gritos lanzo una sonora y sabrosa carcajada aquel extraño turista y dijo en voz alta:
_¡Que barbaridades anda gritando ese valedor!
No se habia fijado que aquel que grito estaba parado frente a él, el cuál le dijo:(alisandoce el bigote)
_¡Oiga amiguito quien grito, barba. . . eso que dijo y de cuál se acaba de burlar!
Al verlo, aquel hombre, titubio y turbado dijo:
_Coj, coj, coj, hum, hum, hum, no se enoje señor, pero lo invito a que analice sus palabras que grita.
_ Pos' cuales, pos' grito varias?, ¡bueno, bueno, en fin con quien tengo el placer de hablar!
_ Por hay hubieramos empesado, soy. . .
Despues de haberse presentado ambos hombres, salieron tan amigos que el chicharronero que no era otro que Juán Juárez (a) Juán Borucas, lo oriento y encargandole su batea con carnitas y su bote alcoholero con manteca y demas mercancia a una mujer habia salido a barrer en ese momento, lo cuál lo vio mal e inocentón el viajero visitante pero no dijo nada; caminaron calles y calles hasta que la esquina de San Pedro y Salida al Gallinero se pararon y que hombre medio chaparrón, botijón y bigotón le señalo la residencia de la AMA DEL BARRIO DE LA LOMA, aquella señora por todos los del barrio conocida como "LA AMITA CHOLITA" Su residencia era una modesta hornacina.
Al verla el peregrino de Zacatecas, xclamo. . .
_ ¡¡¡¡SI ES ELLA, LA QUE ME SALVO DE CARCEL DE SAN JUAN DE OLUA!!!!
El carnicero pelo tamaños ojos y santiguandose se alejo carreiendo y gritando:
_ ¡¡LA AMITA HIZO UN MILAGRO, LA AMITA HIZO UN MILAGRO!!
Cuenta la tradicción, cronica y la leyenda que ese minero a parte de traerle flores y su "exvoto" o cuadro alusivo a la gracia recibida por la Virgen de la Soledad de Piedrita nombre que le dijo al minero para que preguntara por ella, dejo monedas de oro y tres barras de oro para que le compraran la casa a don Toribio Martinez y le contruyeran un templo, todo esto recibio el Señor Cura de Parroquia de los Dolores y de lo cuál fueron testigos Juán borucas, Arcadio Juárez y Cirilo Muñiz, el segundo era el mayordono del templo y encargado de se hiciera la obra.
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